Sus creadores dicen que este vehículo eléctrico puede mantener el equilibrio incluso tras un choque, gracias a sus giroscopios
Día 24/05/2012 - 17.20h
http://www.abc.es/videos-tecnologia/20120524/motors-1654966953001.html
LIT MOTORS
Todavía no estoy del todo seguro si debo llamar al C-1 “motocicleta”, por lo que he decidido dejar el término de lado temporalmente. La primera impresión nos lleva a pensar en una “moto de luz” como las que hemos visto en Tron, pero al mismo tiempo el C-1 de la gente de Lit Motors tiene algo de Segway en su interior. La razón se debe a que el C-1 puede mantener el equilibrio incluso tras un choque, gracias a la intervención de giroscopios. Teniendo esto en cuenta, creo que “coche eléctrico de dos ruedas” resulta mucho más apropiado.
Con el paso del tiempo he visto cómo funciona un Segway y también algunos accidentes, aunque en la gran mayoría de los casos se debe a gente con la habilidad insuficiente para manejar uno, o que directamente hace cosas que un Segway no espera (busca algunos vídeos en YouTube si quieres reírte un rato). Sin embargo, la manera en que trabaja un Segway bien podría estimular el desarrollo de otros vehículos que hagan uso de cosas como el auto-balance. Si se puede lograr en un transporte personal relativamente pequeño, no debería haber inconvenientes para llevarlo a un vehículo más grande, y eso es exactamente lo que la gente de Lit Motors ha estado haciendo con el desarrollo de su vehículo C-1. Si te preguntas si se trata de una motocicleta, la respuesta sería algo como “sí y no”.
193 km por hora
El CEO de Lit Motors Daniel Kim explicó que el C-1 se ubica entre los conceptos de motocicleta y coche. A pesar de contar con dos ruedas, el C-1 trae incorporada una cabina con capacidad para dos personas, pero lo más destacable de este vehículo es su sistema de balanceo automático basado en giroscopios. El centro de gravedad del C-1 es muy bajo, y puede mantener el equilibrio incluso en situaciones extremas como una colisión. La recarga de la batería del C-1 demanda entre cuatro y seis horas, y puede alcanzar una velocidad máxima de 193 kilómetros por hora, con una autonomía que varía entre 241 y 354 kilómetros.
El detalle más importante que me queda por mencionar es que, más allá del vídeo de promoción, nunca vemos realmente en funcionamiento al C-1. La tecnología disponible nos lleva a pensar que un coche de dos ruedas que mantenga el equilibrio gracias al uso de giroscopios puede ser técnicamente posible, pero si ese es el punto más fuerte del C-1, honestamente queremos verlo en acción más allá de las animaciones por ordenador. El precio inicial estimado por cada C-1 asciende a los 24.000 dólares (habrá disponibles unos mil vehículos en su primera producción), aunque se están evaluando importantes reducciones en el precio una vez que el vehículo entre en su fase de producción completa. Claro que, aún teniendo el dinero, habrá que esperar hasta finales de 2014 para acceder a uno. Y no es lo único que tienen en sus planes. Si visitas el sitio oficial, verás un “scooter” de carga bastante curioso...
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